Cada mes, debido a nuestro ciclo menstrual, experimentamos diferentes sensaciones tanto físicas como emocionales, algunas de esas sensaciones son excelentes y nos encantan, se presentan en nuestros días “fuertes” por así decirlo, pero otras que son las que más nos marcan son muchas veces insoportables!, cuando está por llegar nuestra menstruación, y no es invento, las mujeres experimentamos muchos cambios físicos y emocionales, nos sentimos muy sensibles, necesitamos ser engreídas al máximo, o podemos sentirnos tristes y deprimidas, es como si se te cayera el mundo encima y lo ves todo cubierto de gris, las dificultades que manejarías con mayor facilidad en esos días te hacen caer una tormenta en el metro cuadrado en el que te encuentras ubicada y hay relámpagos y rayos en ella, otra reacción es el mal genio, simplemente reaccionamos explosivamente ante todo, cualquier cosa, pero al final realmente quienes se arruinan el ánimo somos nosotras mismas. Pero de hecho si nos gusta que nos engrían esos días, son nuestros “días débiles”, si algún día nos ven así, solamente nos tienen que tratar con más paciencia y más cariño que el de costumbre, porque así somos, son las hormonas, es nuestra sexualidad y si quieren a una mujer (sea hija, madre, esposa, enamorada, amiga), la tienen que aceptar y querer así, porque no se le quitará hasta la menopausia, y en esa etapa se pondrá quizás más explosiva y renegona, como la muy conocida madre de Carlos Enrique.
Ahora en la parte fisiológica pasamos por etapas de expansión de dolor, los senos se hinchan y se ponen sensibles, si tienes quistes mamarios te duele un poquito más y además se expande el dolor para el brazo como un tirón, es una sensación un poco diferente, no es como cuando tienes una herida abierta o como cuando tienes un moretón, en este caso es una molestia más peculiar, como de tirón y molesta mucho, no duele pero ahi esta diciendo presente cada vez que realizas una actividad, felizmente los quistes son benignos, pero igual debemos monitorearlos. Se tiene que consultar con el médico pero un tip: las vitaminas E y B6 ayudan a eliminarlos y/o controlarlos. Seguimos bajando y en la parte trasera de nuestro vientre, a la altura de las vertebras lumbares se inicia un dolor que parte del centro de la columna y se expande a todos los costados y se irradia hasta las piernas o muslos, a mi particularmente se me debilita el cuerpo y más aún las extremidades inferiores, me canso mucho al caminar y no tengo fuerzas, cualquier esfuerzo cuesta el doble y el cansancio llega más rápido, al menos el primer día de regla.
Algunas veces me dan ganas de comer mucho chocolate, otras de comer mucha grasa, pocas veces en esos días quiero comer sólo vegetales o sólo frutas, muchas mujeres experimentamos esto, y es normal porque nuestro cuerpo pierde sangre, prácticamente tenemos una hemorragia mensual!!, se imaginan si cada mes les caería sangre de la nariz?...jodido no?, y no es sólo sangre, son también tejidos del útero que estuvo preparado para concebir y al final no tuvo que cobijar a ningún pequeñito, bueno por ello necesitamos reservas, de ahí parten las próximas afecciones de las mujeres, cuando no tienen una adecuada nutrición, sufren de descalcificación y hasta osteoporosis, caída de dientes y casos de anemia y desnutrición en las zonas más pobres.
Otras afecciones de las mujeres por ser mujeres es por ejemplo el riesgo a tener una infección urinaria porque nuestra pequeña uretra puede fácilmente contagiarse y desarrollar una infección, debemos tener mucho cuidado para nuestra limpieza íntima porque el jaboncillo común puede irritar las paredes de nuestro órgano genital y luego terminar en una infección vaginal, en todo caso un poco de agua tibia es el mejor camino, pero también hay productos de ph balanceado para las pieles mas sensibles. Obviamente conversar con tu pareja también ayuda.
En fin son muchas desventajas las que sufrimos y gracias a Dios, al menos tenemos algo a nuestro favor que es poder concebir pequeñitos hermosos y sentirlos nuestros desde que sabemos de su existencia, cada una de sus pataditas, cuando nadan en su propio hábitar, como se mueven, como se encogen, y toda manifestación interior, sólo por ello estoy dispuesta a soportar los años venideros de sufrimientos y obviamente también por los engreimientos que podemos tener nuestros seres queridos con nosotros, el desayuno a la cama de mamá, el calorcito de las manos de tu novio en tu pancita para que baje el dolor y los instantes de comerte toda la grasa del mundo sin remordimiento alguno.



